En Abu Dabi el Vitesse no ha podido escapar de la polémica FOTO: Servicio de prensa del Vitesse |
El Vitesse, club holandés en el que Renato Ibarra cumple sus últimos meses de contrato, empezó hoy su stage de minipretemporada (si cabe el término, ya que en realidad hablamos de un parón invernal) en los Emiratos Árabes, a donde se han desplazado huyendo del frío que azota el centro y norte de Europa en esta época del año. De lo que no han podido escapar es de la polémica.
Si la gira por Medio Oriente ya tenía cierto atractivo mediático por el duelo por un puesto en el once entre Renato Ibarra y el recién llegado Bertrand Traoré, prestado por el Chelsea para que tenga minutos, el periplo árabe del club de Arnhem no podía empezar con más morbo. Todo por culpa de la decisión de los Emiratos Árabes de no permitir la entrada de Dan Mori, defensa israelí del Vitesse.
Casi lo bajaron del avión
Dan Mori, el israelí del Vitesse FOTO: Diario De Gelderlander |
El futbolista comunicó en su Facebook el pasado sábado, víspera del viaje, que se le había denegado la entrada al país a pesar de que al club, en primera instancia, no se le informó de ningún problema en cuanto a los visados del grupo. El club confirmó la versión del jugador pero decidió proseguir con lo planeado y viajar ayer a los Emiratos sin Dan Mori, quien se desahogó en las redes sociales diciendo que "orgulloso" de sí mismo y que deseaba a todos "una maravillosa semana".
La decisión de proseguir la gira pese al boicot al jugador no sentó bien en varios movimientos políticos holandeses. Geert Wilders, líder del conservador Partido por la Libertad, calificó al Vitesse de "club cobarde". Pieter Omzigt, diputado democristiano, fue más allá y los denominó "club sin cojones" (zonder ruggengraat, literalmente 'sin espalda' aunque con el sentido antes citado). También el movimiento socialcristiano Christen Unie manifestó su desacuerdo en términos menos floridos.
El Vitesse, criticado últimamente por su relación con el Chelsea |
El Vitesse intentó zanjar la discusión con la comparecencia de su portavoz, Ester Bal. "Nos mantenemos alejados de la política y de la religión", es el justificativo de un club al que los críticos sitúan en la órbita del multimillonario Roman Abramovich, dueño del Chelsea, tan judío como el futbolista a quien los Emiratos han denegado la entrada.
Será mañana martes cuando el equipo dispute su primer amistoso en tierras emiratíes. Contra el Wolfsburgo alemán tendría que producirse el primer asalto en el combate por la titularidad entre Renato Ibarra y el recién llegado Traoré, uno de los cinco futbolistas propiedad del Chelsea que los holandeses deben foguear. De momento las sensaciones parecen decantarse en favor del jugador de Burkina Faso. "El técnico Peter Bosz está encantadísimo con Traoré" opina Maurits Straatman, enviado de la radiotelevisión pública Omroep Gelderland a la gira del Vitesse. Mañana martes a partir de las 10:30 de la mañana, hora de Ecuador, se empezará a resolver la incógnita.
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