El delantero ecuatoriano Miguel Parrales (Portoviejo, 1995) cumplirá su aspiración de llegar al fútbol español pero el sueño de debutar en Primera aún tendrá que esperar. Fuentes periodísticas cercanas al Villarreal nos confirman que el joven, efectivamente, se comprometerá con el club amarillo como indican medios ecuatorianos. Sin embargo, Parrales no será todavía el tercer ecuatoriano en ponerse la camiseta del primer equipo groguet.
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Parrales con la selección ecuatoriana. FOTO: @parralesmanabi. |
El plan del equipo español es el siguiente. Dado que Parrales es todavía menor de edad, el acuerdo verbal que se tiene con los agentes del futbolista no se firmará en papel hasta que cumpla los 18 años, el próximo 26 de diciembre. El préstamo por seis meses (con opción de compra) no obliga a que el aún atacante del Independiente debute en la primera plantilla. A Parrales se lo inscribirá con el Villarreal B, el equipo filial que milita en Segunda División B.
La Segunda División B española es el tercer nivel del balompié nacional, tras la Primera y Segunda divisiones. A diferencia de las categorías de oro y de plata, que son de alcance nacional, la Segunda B se disputa en 4 grupos regionales de 20 equipos. El Villarreal B milita en el grupo 3 junto a otros clubs de Cataluña, la Comunidad Valenciana y las Islas Baleares. 15 de ellos son primeras plantillas y apenas cinco son filiales. A efectos de organización de las categorías del fútbol español, la Segunda B podría equipararse con los zonales de Segunda en Ecuador, donde compiten instituciones de provincias vecinas, aunque en el caso español la competición interprovincial (aunque no nacional) dura todo el año.
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Valencia, primer ecuatoriano en firmar con el Villarreal. FOTO: @juliovacacela |
El futuro equipo de Parrales marcha actualmente en la 7ª ubicación disputadas 16 de las 38 jornadas que comprende la temporada regular. Sólo ha ganado dos de los últimos siete partidos. El Villarreal B debe clasificarse entre los cuatro primeros para disputar eliminatorias a doble partido con los mejores clasificados de los otros tres grupos y acceder a las cuatro plazas de ascenso a Segunda División. Parrales tendrá 19 fechas para ayudar a conseguir ese objetivo.
El joven delantero manabita será el cuarto jugador ecuatoriano en vestir la camiseta del Villarreal, aunque solamente dos de ellos llegaron a enfundarse la del primer equipo, ambos por seis meses antes de salir a un préstamo del que ya no regresaron. Hablamos de Antonio Valencia, quien en 2005 fue el pionero del desembarco ecuatoriano en el Submarino, a cuya primera plantilla llegó directamente, y de Jefferson Montero, quien después de destacar un año en el filial fue promovido en 2010. El otro compatriota que tuvo la oportunidad de ser amarillo fue Chiqui Guerrero, quien no se consolidó durante sus seis meses a préstamo en el Villarreal B (2012) y acabó volviendo al Independiente sin probarse la malla del primer equipo.
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Montero también llegó al filial del Villarreal. Fue en 2009. FOTO: @juliovacacela |
Tanto en la época de Montero como en la de Guerrero el filial militaba en Segunda División, pero el equipo fue obligado a descender a 2ªB tras la caída del Villarreal de Primera en 2012. Un primer plantel y su filial no pueden competir en la misma categoría.
Valencia, Montero, Guerrero y Parrales tienen un elemento en común. Todos fueron representados en el momento de su firma con el Villarreal por el empresario Diego Herrera. Además, tres de ellos (Jefferson, Chiqui y ahora Miguel) militaban en el Independiente del Valle. Por lo visto, Herrera y el flamante subcampeón nacional tienen puertas abiertas en las instalaciones de la ciudad deportiva de Miralcamp, donde además de jugar el B se encuentran las oficinas de los directivos del Villarreal. Parrales, mientras tanto, renunciará a disputar una Copa Libertadores por jugarse la oportunidad de meter cabeza en el fútbol europeo.